El plan CULTA pretende estimular el desarrollo económico y la fijación de población en la provincia de Córdoba, considerando la cultura como generadora de sinergias urbanas. Mediante análisis documentales y ese trabajo de campo, identificamos y mapeamos agentes, acciones y equipamientos con potencial cultural ante el reto demográfico.
► En el mapa puedes consultar los equipamientos culturales de los municipios que llevamos analizados hasta el momento. Se dividen en las siguientes categorías:
🟥 Contenedores. Espacios “vacíos”, sin recorridos establecidos ni zonificación.
🟨 Secuencias. Organización de espacios generando un recorrido.
🟪 Puntos de acceso. Facilitan el acceso individual a la cultura, de forma analógica o digital.
🟦 Focales. Dirigen la mirada hacia un punto concreto del espacio.
🟩 Espacios públicos
Fichas de equipamientos por municipio
Cómo funciona CULTA
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CULTA (Plan Estratégico para el Desarrollo Territorial de la Cultura de la Provincia de Córdoba) se propone observar el fenómeno urbano a través de su estrecha relación con la cultura, defendiendo el potencial de ésta como generadora de relaciones urbanas.
Reconocer la tupida red de municipios que conforman el territorio cordobés no sólo revela su realidad geográfica, sino su identidad histórica y, sobre todo, cultural. La relación entre polos distintos es un fenómeno que genera sinergias y complementariedad en el territorio. En este escenario, la cultura y sus infraestructuras asociadas se entienden como el material que amalgama y construye este archipiélago urbano de gran potencial.
Entre las diferentes facetas de la cultura, la arquitectónica es sin duda una componente fundamental, por su potencialidad transformadora de la ciudad y del territorio y por su interferencia directa con la vida cotidiana de los ciudadanos, además de ser un motor económico para el futuro de la provincia.
Ambas aproximaciones recorren caminos de investigación y análisis paralelos, que se irán cruzando en un proceso sinérgico: la cultura y los equipamientos culturales, por un lado; cada uno de los municipios de nuestra provincia –para entender su dimensión urbana y territorial, espacial y temporal, además de social–, por otro.
Compartimos, asimismo, los criterios de la Nueva Agenda Urbana de Hábitat III (2016): “La planificación y legislación urbanística con una suficiente financiación pública proporcionan un marco útil para la adopción de criterios de resiliencia urbana. Sin una buena planificación urbana, sin legislación y buen gobierno, sin finanzas, incluso los planes mejor diseñados nunca llegarán a buen puerto. En términos de planificación, las estrategias de resiliencia deben apoyar un modelo positivo de desarrollo urbano que debe ser compacto, complejo, incluyente y conectado”.
Sinergia en red entre municipios
Establecer los criterios de sinergia en red entre los municipios y las comarcas de Córdoba, interpretando la cultura como elemento determinante y activo en el territorio, y aprovechando y poniendo en valor la vocación cultural de cada comarca y municipio.
Optimización de equipamientos culturales
Analizar la condición actual y proponer la optimización de los equipamientos provinciales existentes, así como su relación con la consolidación y activación de los municipios y su espacio público. En definitiva, con una visión urbana además de arquitectónica y de uso.
Cultura como motor de generación y regeneración urbana
Incentivar el entendimiento de la cultura y su potencial como motor de generación y regeneración urbana, proponiendo modelos de gestión, tanto de los equipamientos como del espacio público, abarcando novedosos ejemplos consolidados en ámbito internacional.
Actuaciones estratégicas
Definir las herramientas metodológicas para la asimilación de este documento a lo largo del tiempo, siendo asumido por las instituciones y la ciudadanía de cara a las actuaciones estratégicas necesarias en cuanto a infraestructuras culturales en su relación urbana.
Las herramientas metodológicas de CULTA no tienen la misión única de servir a investigadores y expertos, sino que también persiguen la generación, ya desde las primeras fases de su puesta en funcionamiento, de dinámicas participativas que fomenten la implicación activa de la ciudadanía durante todo el proceso.
1. Delimitación del ámbito de estudio
La redacción del Plan CULTA se está desarrollando en cinco fases de trabajo, contemplando cada una de ellas una selección de municipios a estudiar que conformen una muestra representativa y coherente en relación al territorio de toda la provincia.
Para la Fase 1 de CULTA, entendida como fase de laboratorio, se seleccionaron 6 municipios que reúnen distintas situaciones geográficas, poblacionales, etc., de tal manera que en ellos se pudieran encontrar representados la gran mayoría de municipios de la provincia. Los municipios seleccionados fueron: Alcaracejos (Valle de Los Pedroches), Fuente Obejuna (Valle del Guadiato), Hornachuelos (Valle Medio del Guadalquivir), Montoro (Alto Guadalquivir), Castro del Río (Campiña Este – Guadajoz) y Cabra (Subbética Cordobesa).
Para la redacción de la Fase 2 de CULTA se seleciconaron 14 municipios, dos en cada comarca, esta vez eligiendo aquellos con mayor población. Con ellos, las localidades más pequeñas pueden establecer conexiones más fluidas y recurrentes. Los municipios seleccionados fueron Pozoblanco y Villanueva de Córdoba en el Valle de Los Pedroches, Peñarroya-Pueblonuevo y Villaviciosa de Córdoba en el Valle del Guadiato, Palma del Río y Posadas en el Valle Medio del Guadalquivir, Bujalance y Villa del Río en el Alto Guadalquivir, Baena y Nueva Carteya en la Campiña de Baena, Montilla y Puente Genil en la Campiña Sur, y Lucena y Priego de Córdoba en la Subbética Cordobesa.
En la Fase 3 de CULTA se ha apostado por analizar los municipios que permitan estudiar comarcas completas: las de Valle Medio del Guadalquivir, Campiña Sur y Los Predroches. El objetivo es profundizar en las relaciones existentes entre las localidades de una misma comarca, y entre estas y el resto de la provincia y/o municipios limítrofes.
2. Análisis territorial
Para entender la actividad cultural resulta indispensable entender el espacio en el que se desarrolla. Mediante el análisis a escala territorial y urbana de dichos espacios, empleando el concepto de área de influencia potencial, llegaremos a entender cómo se vertebra el territorio donde se producen las manifestaciones culturales.
3. Análisis visual y trabajo de campo
Uno de los trabajos que consideramos imprescindibles para el proceso de investigación y reconocimiento de la realidad cultural existente en cada municipio es el reconocimiento visual de las calles, los equipamientos culturales y los espacios potenciales para el desarrollo de las manifestaciones culturales, que forman un sistema cultural.
4. Formularios
Se han utilizado los modelos de formulario ofrecidos por Google Forms para diseñar encuestas que puedan ser cumplimentadas tanto por los técnicos asociados a los equipamientos como por el grupo encargado de la puesta en práctica del Plan.
5. Encuestas
Como mecanismo para obtener información acerca de los hábitos culturales de la población de cada uno de los municipios seleccionados, se ha considerado que las encuestas constituyen la herramienta más eficiente y manejable, dadas las características del análisis y los límites de tiempo establecidos.
6. Sistema de indicadores
Se ha trabajado asimismo en un sistema de indicadores elaborados a partir de los formularios. El objetivo es mostrar las fortalezas, debilidades y los aspectos mejorables de cada equipamiento, asignando valores de carácter cualitativo a los datos obtenidos, para después representarlos en un gráfico que permita contemplar a golpe de vista el estado general del equipamiento cultural analizado.
7. Entrevistas
El proceso de definición conceptual y de elaboración de herramientas se ha complementado con distintas fases de trabajo de campo en las cuales se ha contado con la colaboración de distintos agentes, entre ellos las autoridades locales de cada uno de los municipios, pero también cualquier individuo que estuviese interesado en participar de forma activa en el proceso.
8. Grupos de discusión
El motivo por el que se ha elegido este tipo de entrevista y no otro es su utilidad a la hora de generar un discurso de carácter colectivo que puede ofrecernos un esbozo de la realidad comunitaria del municipio en cuanto a la cultura. Más que analizar un listado de opiniones individuales acerca del estado de la cultura en el municipio, consideramos interesante atender a cómo es percibida esta desde un punto de vista social, para evitar caer en una mera exposición de necesidades individuales concretas.
9. Foros de expertos
De cara a la parte propositiva del plan, además de basarnos en los datos obtenidos mediante las herramientas de análisis anteriormente descritas, consideramos necesario concertar una serie de reuniones con diversas personalidades procedentes del mundo de la cultura y el desarrollo territorial para que pudiesen compartir sus experiencias y su punto de vista acerca de cómo establecer líneas estratégicas para el desarrollo territorial de la cultura.
El Plan CULTA no busca añadir una serie de nuevas programaciones y propuestas culturales a una larga lista de iniciativas ya existentes, sino proponer un enfoque metodológico y epistemológico alternativo que permita una evolución de la cultura en su más amplio sentido como elemento vehicular del desarrollo de las sociedades y los territorios.
1
Estrategias para la dinamización cultural
Se propone la mediación y la integración de prácticas y saberes locales con propuestas contemporáneas en una especie de «injerto» cultural, frente a la práctica habitual de «paracaidismo» cultural, que configure un tejido vivo y en constante transformación y desarrollo.
2
Estrategias para el desarrollo de proyectos e iniciativas culturales
Se entiende que las iniciativas deben ir más allá del voluntarismo y el amateurismo, apoyándose en una guía adecuada que asegure su éxito.
3
Estrategias para residenciar la cultura y la población
Esta línea de actuación pasa por entender la cultura no como mero ocio y tiempo libre, sino como ocupación. Se trata, por tanto, de establecer las condiciones materiales necesarias para que sea posible desarrollar oficios relacionados con la cultura en cualquier contexto.
4
Estrategias para la continuidad de los proyectos culturales
Consideramos clave que las iniciativas culturales no partan únicamente de las administraciones locales, y que además no dependan de ellas como única fuente de sostenibilidad. Es decir, se persigue construir proyectos duraderos y estables que no estén sujetos a las fluctuaciones políticas institucionales.
5
Estrategias para la financiación de la cultura
Dado que entendemos que una iniciativa debe ser sostenible en cualquier entorno, y sin desvirtuar la importancia de la financiación pública en materia cultural, se proponen métodos como la figura de las cooperativas culturales o herramientas de financiación mixta como el micromecenazgo o el matchfunding.
6
Estrategias para mudar del objeto cultural al sujeto cultural
Este punto ya era clave en el Plan de Equipamientos e Infraestructuras Culturales de Córdoba (2010). Proponemos superar la dicotomía consumidor/productor de cultura en favor de un sujeto más complejo y proactivo, una figura intermedia que es capaz de participar de la cultura en múltiples dimensiones, a la que algunos autores llaman «prosumidor».
7
Estrategias para comunicar la cultura
Hacemos hincapié en la importancia que tienen en este aspecto las nuevas tecnologías de la información, teniendo en cuenta sin embargo la existencia de otros públicos. Por lo tanto, la clave está en favorecer la cercanía y adaptar los métodos de acuerdo con el público cultural al que nos dirigimos.
8
Estrategias para desplazar la cultura y hacerla accesible
A raíz de los análisis llevados a cabo, se hace patente la necesidad de innovar en los sistemas de transporte. Valoramos en este sentido iniciativas como la de los transportes públicos a demanda.
9
Estrategias para la integración del patrimonio cultural
El patrimonio cultural debe alejarse de la turistificación y ser entendido como parte de la comunidad (Cultura Ciudadanía, 2017). Para ello es necesaria la existencia de un sentido de identidad y representatividad, y una valoración por parte de las poblaciones. En este sentido, el ecomuseo se presenta como una alternativa interesante.
10
Estrategias para la memoria y las prácticas culturales inmateriales
La puesta en valor de las prácticas culturales inmateriales es vital para el desarrollo de las sociedades, y para ello se necesita de recursos de investigación, así como un proceso de re-conocimiento cultural rico y profundo.